jueves, 13 de octubre de 2011

Polytechnique

b. Está claro que aquí, en este blog, cuando nos impresiona un director (¡tengo que ver más películas canadienses!), lo seguimos y vemos qué hubo antes. En Indencies nos impresionó cómo, finalmente, el problema palestino-israelí se podía reducir a símbolos (aquella escena en el bus que explota): ¿qué pasa cuando no se puede identificar al enemigo físicamente?
c. Y aquí estamos, 1989, cuando todavía no había celulares, y gracias a dios (sí, con minúscula) que no leo reseñas para ver una película. En este caso le hubiese quitado efecto. Y bien que esté en blanco y negro, se entiende.
d. El asesino:
“¿Por qué existir sólo para agradar al gobierno? Siendo éste un retrogrado pensador por naturaleza. Salvo cuando interviene la ciencia, yo siempre me he enfurecido  por los feministas. Ellas se aferran a los beneficios de la mujer: seguro barato, licencia de maternidad, licencia preventiva; mientras se apoderan de esos hombres. Es una verdad tan obvia que si los juegos olímpicos borrarán la distinción hombre-mujer, habría sólo mujeres en los eventos elegantes. Así que los feministas están luchando para quitar esa barrera. Ellas son tan oportunos que nunca sacan ganancia del conocimiento acumulado por el hombre a través de los años. Ellas siempre intentan falsearlo cada vez que pueden. Así que, el otro día, escuché que estaban honrado a los hombre y mujeres canadienses que lucharon en la primera línea durante las guerras mundiales, ¿cómo puede ser eso cuando las mujeres no están autorizadas a ir a la primera línea de combate? ¿Escucharemos de las legiones de mujeres de Cesar y las galeras de esclavas? Quienes por supuesto ocuparon el 50% de la historia.”
e. Ella (al padre o madre del asesino):
“No nos conocemos pero estamos conectados. Te escribo porque hoy, por segunda vez en mi vida, tengo miedo. La primera vez fue cuando enfrenté a tu hijo. Tu hijo me abrió los ojos ¡cuánto odio puede haber en este mundo! Y me atemorizó de por vida. ÉL esta muerto y yo estoy viva. Él es libre y yo no. Todo el mundo me habla de lo fuerte que soy. He tenido bastante siendo fuerte. Algunas veces quiero gritar en la cima del tejado cómo me he lastimado y no solo físicamente. Quiero enroscarme en una pelota y esconderme. Todos los días pienso en Stephanie que murió en mis brazos. Pienso en todos mis amigos que han muerto y lo doloroso de aquellos días. Pienso en todas las mujeres de todas las edades que fueron heridas en sus almas. Todos esos pensamientos pesan sobre mí y estoy cansada de llevar ese peso. EL amor me trajo un regalo: un hijo crece dentro de mi. Quiero con todo mi corazón que este hijo sea feliz pero tengo miedo. Estoy cansada  de sentir miedo. Tengo que volver a tener fe otra vez y darle a la vida otra oportunidad... así podre levantarme por mi misma. Y me levantaré por mí misma. Si tengo un varón, le ensenaré cómo amar.Si tengo una hembra, le diré que el mundo es de ella."
¿Entonces, mi amor, el cine es sólo una cámara bien puesta? ¿Será, mi amor, Canada un país indie? Dos preguntas.

Polytechnique (2009)
Con Maxim Gaudette, Sébastien Huberdeau y Karine Vanasse (¿cómo lo digo?)
Canciones: Marian de The Sisters Of Mercy y Love In A Void de Siouxsie And The Banshees. Ya, Tainted Love de Soft Cell.

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